El nervio vago es el nervio más largo del cuerpo humano y tiene innumerables ramas que abren paso desde el cerebro hasta la parte más baja de los intestinos, tocando la mayoría de los órganos principales a lo largo del camino. Con esto dicho, ¿ya puedes notar su importancia?
Algunas funciones del nervio vago:
- Modula el sistema nervioso parasimpático, lo que contrarresta la respuesta de estrés provocando la llamada “respuesta de relajación”.
- Cada vez que exhalás, tu nervio vago arroja un poco de “sustancia vaga” en tu corazón. La sustancia vaga actúa como una tranquilizante que mejora la variabilidad de la frecuencia cardíaca (salud cardiovascular y presión sanguínea).
- Es responsable de mantener el tracto digestivo en buen funcionamiento, contrayendo los músculos del estomago y los intestinos para ayudar a procesar los alimentos.
El problema es cuando el nervio vago no funciona correctamente. Síntomas como ansiedad y depresión, zumbidos en los oídos, dificultad para tragar, dificultad para hablar, síndrome del colon irritable, reflujo gastroesofágico, acidez de estómago, y enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, entre muchas otras pueden ser resultado de problemas con el nervio vago.
La buena noticia es que los estudios demostraron como los ajustes quiroprácticos influyen de manera muy importante sobre el sistema nervioso. El incremento de la actividad vagal asociado al cuidado quiropráctico es uno de los mecanismos por los cuales la quiropráctica promueve tu salud y tu bienestar general. Este es el verdadero poder de la quiropráctica.
Recuerda: Quiropráctica = mejor función de tu cuerpo.
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Dra. Patricia Jiménez Baralt
P.D. Pendiente al reto “En Shape pa’ las Navidades.” Comienza el martes 12 de noviembre. Siempre recuerda compartir esta información.
