Por José N. García, astrólogo védico*
San Juan, Puerto Rico – Hay personas que sienten la necesidad de hablar todo el tiempo, del mismo modo que hay aquellos que no se sienten cómodos si la persona con la que ellos están no les habla constantemente.
Hablar sin parar es la consecuencia de nuestro diálogo mental y lo peor es cuando esa conversación se comparte aun cuando sean temas banales o sin sentido.
También es el producto de nuestros estados emocionales. Claro está, muchas veces sentimos que si no hablamos estamos haciendo sentir mal a quien tenemos de frente. Lo cierto es que entre más entramos en el silencio mental más se manifiesta en la ausencia de palabras.
Si bien el ayuno de alimentos sirve para controlar los impulsos del cuerpo, el ayuno de palabras nos ayudará a ganar control sobre nuestras emociones. La clave ahí precisamente: el ayuno de palabras o el mauna vrata o ayuno en el silencio.
Muchos maestros y practicantes seleccionan un día de la semana para hacer este tipo de ayuno y simplemente no emiten palabra alguna por 24 horas. Si tienen que dar alguna respuesta o bien resolver algún asunto, escriben pero no hablan.
Es posible que a muchas personas se les dificulte esta práctica por su estilo de vida, pero hay alternativas. Una de estas es la de no hablar por periodos de tiempo o ciertos días, como por ejemplo, días de fiesta, los domingos en la mañana etc.
La otra opción es la siguiente: si no tienen que hablar no lo hagan y mucho menos busquen excusas para hacerlo, y comuníquense solo si es necesario. Lo ideal sería que el silencio físico estuviese acompañado del silencio mental, pero por algún sitio debemos comenzar.
Hace muchos años cuando nuestro mi maestro Geshe Lhundup Sopa venía a Puerto Rico y yo tenía la gran oportunidad de salir con él, en muchas ocasiones nuestros viajes eran momentos de silencio mutuo que solo se rompía si yo hacía alguna pregunta.
Lo mismo fue mi experiencia con el maestro y yogui Khempo Konchok Gyaltsen. El hacía silencio o cantaba los poemas del Yogui Milarepa. Ese es el producto del control de los vehículos inferiores. Lo mismo digo del Dalai Lama, cada una de sus palabras es pensada, medida y precisa.
Según vayamos madurando y controlando nuestros sentidos de acción y percepción, evitaremos la producción del nuevo karma que determinará nuestras vidas futuras.
José N. García es sicólogo y astrólogo hace más de 30 años. Es Fundador del Instituto de Astrocosmos, la primera escuela de investigación y enseñanza de Astrología en Puerto Rico. Fue educado en la Astrología Védica por el maestro Dr. Krishna Bhat, un yogui y doctor en Física, Astrofísica y Astrología Clásica Védica. La Astrología Védica es practicada en la India, y se remonta a más de 5 mil años atrás. Actualmente dicta charlas y seminarios por todo Estados Unidos, América Latina y Puerto Rico. Además, realiza consultas astrológicas por cita previa. Para más información sobre José N. García llame al (787) 378-2986. Correo electrónico: josengarcia24@gmail.com / Youtube: JOSENGARCIA / Facebook: JOSENGARCIA24