Gracias con cada latido de mi corazón

A lo largo de mis años en la música, decidí incluir como uno de mis objetivos de vida, el hacer las cosas bien: sin competir con nadie más que conmigo mismo, complaciendo y respetando al público que acudía a los eventos en los que me he presentado y/o adquiría con mucho cariño, para su deleite, la música que grababa en sus diferentes formatos. Me dediqué a sembrar, como reza el viejo dicho, aún en los terrenos más áridos, lejanos y agrestes, y aunque sabía que el tiempo de cosecha puede tardar mucho en llegar, nunca desesperé. Sin embargo, desde un tiempo a esta parte, tengo que ser honesto y debo de reconocer, he empezado a disfrutar mucho ese proceso (el de cosechar), el mismo que ha alcanzado a mi familia y a quienes de una u otra manera colaboraron conmigo (y lo siguen haciendo en la actualidad) en la tarea de plantar por doquier, mi enseña: la bandera puertorriqueña.

Para un artista, cualquiera sea la faceta del arte a la que se dedique, no hay mejor reconocimiento que el que se recibe en tierra propia: en mi caso, mis 100 x 35. La última semana, ha sido una de las más felices a lo largo de mi caminar como solista, y lo digo a los cuatro vientos. He podido sentir el aplauso de mi pueblo que es -además de edificante y reconfortante- uno que me motiva a seguir llevando buena música pues este corazón y la voz con las que el creador me ha bendecido, siguen como el primer día, dispuestos a dejar todo en el escenario. Verlos y verlas disfrutar mis canciones, bailarlas como solo ustedes saben hacerlo además de escuchar corear mis canciones, es algo que llena mi humanidad y exigen de mi parte un agradecimiento especial, y éste dice así:

Aunque nací en New York, fue La Ciudad Criolla: Caguas, la que me recibió a mis cortos 4 años. Con ella me identifico, y al igual que los nacidos aquí, he sentido, siento y sentiré orgullo de ser puertorriqueño y de ser reconocido como tal. Mis intereses musicales se remontan a las escuelas de Caguas, Abelardo Díaz Morales (Elemental), Nicolás Aguayo Aldea (Intermedia) y Manuela Toro Morice (Superior). Luego sería la Escuela Libre de Música Antonio Paoli, la encargada de formarme en la materia. La Orquesta Casino (del Maestro Pacheco), la Orquesta La Paz y la Banda Liberación, afianzarían posteriormente, el camino que permitiría mi ingreso a la Orquesta Internacional del señor Pedro Conga. Esas bases, todas muy sólidas, impulsarían la decisión de iniciar mi carrera en solitario hace ya 30 años: la que me ha permitido viajar por el mundo entero, esperando ansiosamente el final de cada jornada, para regresar a este pedacito de tierra bañado por las aguas del Mar Caribe.

En el proceso, he tenido presentaciones locales en eventos de asistencia masiva y otros de menor envergadura, pero poder ser parte de la programación de una fiesta de pueblo, es una experiencia sinigual. Estas fiestas se convierten en un baño de popularidad necesario que todo cantante y/o músico (hombre o mujer) necesita como combustible para poder continuar haciendo lo que bien sabemos hacer. Así las cosas, siempre hay una primera vez para saborear ese cariño de pueblo; y me ha correspondido disfrutar -durante tres días consecutivos- el calor humano de mi gente. Primero en Cataño y su Festival del Malecón, el pasado viernes 14 de julio; y aunque mi presentación fue programada para la primera hora del nuevo día, el público permaneció y me acompañó durante mi presentación. El sábado 15 de julio, tocó el turno de celebrar los 25 años del tradicional Rumbón de Barrio en el pueblo de Hatillo, y aunque amagos de aguacero amenazaron la noche, nuevamente el público nos acompañó. Finalmente, para cerrar la semana, nos trasladamos hasta Río Grande, para decir presente y deleitar al público que se dio cita en las celebraciones de la afamada Fiesta de la Ciudad del Yunque.

Fiestas del Malecón, Cataño

Rumbón de Barrio, Hatillo

Fiestas de la Ciudad del Yunque, Río Grande

Me siento contento y revitalizado, y con ganas de volver a cantarles nuevamente, de confundirme entre ustedes para darles mi abrazo y expresarles mi agradecimiento que por ahora es a través de este comunicado, pero que espero hacerlo personalmente.

Igual Que Ayer, Puro Corazón