Dislexia: condición que afecta a niños y adultos

Dislexia: condición que afecta a niños y adultos

Por Lic. Nellie Torres de Carella, patóloga del habla y lenguaje

Directora, Instituto Fonemi de Puerto Rico y la Academia Fonemi

San Juan, Puerto Rico – Octubre es el mes de concienciación sobre el diagnóstico de dislexia, un problema que se manifiesta desde los primeros grados y que puede ser evidente aún en la adultez, afectando la ejecución escolar y limitando las posibilidades de empleo. La dislexia no es un problema que solo afecta a los niños, en los que se perjudica significativamente la ejecución escolar, sino que de no atenderse a tiempo, tendremos adultos con dislexia con limitaciones en cuanto a posibilidades de empleo. ¿Hay esperanza?

A continuación se explica qué es la dislexia, qué indicadores presentan quienes la padecen, tanto niños como adultos, y qué podemos hacer para atender esta condición sin importar qué edad tenga quien la padece.

¿Qué es la dislexia?

La dislexia es un trastorno del aprendizaje de alta prevalencia que crea una discapacidad específica para aprender a leer y cuya causal no es por déficit intelectual, físico o sociocultural.

¿Cómo se manifiesta la dislexia en diferentes edades?

Nivel preescolar. Hay unos indicadores de dislexia que se hacen evidentes a nivel preescolar, por lo cual, si se detectan, se puede comenzar a intervenir con los mismos para evitar un fracaso a nivel escolar.

Indicadores:

  • Rezago en el desarrollo del lenguaje. Hablan como un niño más pequeño.
  • Dificultad con conceptos espaciales (adentro, al lado), temporales (antes, después, los días de la semana) con el aprendizaje de los números y las vocales.
  • Dificultad con las rimas y con conciencia fonológica, como determinar con qué sonido empieza una palabra.
  • Dificultad con la comprensión de instrucciones.
  • Dificultad con la memoria y con recuperar palabras o letras.

Nivel escolar. A nivel escolar los indicadores se hacen más evidentes y claros una vez el estudiante comienza el aprendizaje de la lectura en Kínder. Los estándares educativos establecen que al finalizar ese año escolar los niños deben estar leyendo, algo muy poco probable en un niño con dislexia.

Según avancen los grados, el problema de dislexia se hará más evidente. Esto causará que su autoestima se vea lacerada.

Indicadores:

  • Dificultad con unir sonidos (síntesis fonológica) para formar sílabas y palabras o para detectar y separar los sonidos dentro de las mismas (segmentación fonológica).
  • Dificultad para memorizar y reconocer el abecedario.
  • Saltan líneas y no se percata del error.
  • Dificultad para hacer la asociación entre la letra con su sonido.
  • Confusión con letras que tienen cierta similitud, como “a” y “o” escritas a mano, la “a” y “e” en forma impresa, entre otras.
  • Omisión de letras y palabras.
  • Inversión de letras y números.
  • Sustitución de palabras.
  • Lectura mecánica, lenta, sin inflexiones, sin signos de puntuación.
  • Dificultad para comprender lo que leen.
  • Problemas para determinar la izquierda de la derecha.
  • No les gusta leer.

Nivel de Adulto. Si un adulto no fue ayudado a desarrollar la lectura podría presentar las mismas dificultades que presentaba a nivel escolar y no ser lector. Sin embargo, algunos tendrán cierta mejoría con tutorías. Pero aún con las tutorías, los indicadores de dislexia serán visibles si estos adultos no reciben ayuda con terapias especializadas para este diagnóstico.

Indicadores:

  • Lentitud al leer.
  • Si aumentan la rapidez lectora cometen errores por confusión de letras con rasgos visuales similares.
  • Deben leer varias veces el escrito para comprender el mensaje.
  • Dificultad con análisis de lo que leen.
  • No les gusta leer.
  • Evitan actividades en las que tengan que leer en voz alta.
  • No pueden obtener un grado universitario, aunque intelectualmente tengan la aptitud.
  • Algunos son desertores escolares.

¿Hay esperanza para los individuos con dislexia?

¡Claro que hay esperanza! La detección a tiempo mediante una evaluación, así como el comienzo de terapias especializadas, puede hacer una diferencia al evitar el fracaso escolar y un futuro profesional incierto.

Los programas terapéuticos multisensoriales son muy exitosos para ayudar a estos individuos. Los ayuda a desarrollar la destreza de lectura de acuerdo a lo que se espera para cada edad o grado. No desarrollar la lectura trae consecuencias y dificultades emocionales por no dominar la destreza más importante para el aprendizaje y el éxito escolar. Lo ideal es comenzar a edad temprana, pero también hay esperanza con el adolescente o adulto joven que padece dislexia. Nunca es tarde para lograr conquistar o mejorar la destreza de lectura si se le brindan las ayudas terapéuticas adecuadas.

  • La autora es patóloga del habla y lenguaje y directora del Instituto Fonemi de Puerto Rico. El Instituto Fonemi de Puerto Rico es una institución terapéutico-educativa que utiliza los programas, modalidades y técnicas de terapia más efectivas, como la terapia sensorial auditiva Tomatis, el programa Lindamood Bell, la terapia oral-motor, la terapia para apraxia del habla infantil y la de narrativa, para ayudar a niños y jóvenes con diversos desórdenes de desarrollo o diagnósticos a superar muchas de sus  dificultades. Ha desarrollado un programa integrado e intensivo para niños con autismo, problemas de lectura y escritura, apraxia del habla infantil y para prescolares con implante coclear. Para información, llama al (787) 774-1163 / 1164, accede a nuestra página de internet www.fonemipr.com, o escribe al correo electrónico info@fonemipr.com.

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